Atypical, una de las series más exitosas de la plataforma de Netflix, se ha vuelto bastante polémica luego de descubrirse su afiliación y apoyo financiero a movimientos en contra de la comunidad autista.
Atypical es una comedia dramática de 4 temporadas creada por Robia Rashid. La historia se centra en el día a día de Sam, un joven autista de 18 años que es impulsado por su terapeuta a vivir una vida más independiente. Aunque la historia tuvo una gran aceptación por parte del público de Netflix, no todos la recibieron con entusiasmo. Este rechazo incluso se incrementó después de descubrir el lado oscuro de la producción de la serie.
Atypical y una controversia atípica
En los últimos años, se hizo presente en Estados Unidos un gran movimiento en contra de la comunidad autista con el fin de “encontrar la cura” del espectro. Diferentes artistas e incluso políticos se sumaron como participantes en dicha causa, la cual generó un gran malestar en la comunidad. Entre quienes se encuentran al frente de dicho movimiento se encuentra “Autism Speaks”, una controvertida fundación que “lucha por los derechos de las personas autistas”.
“Autism Speaks” fue fundada en 2006 con el objetivo de alzar la voz en contra de la discriminación y luchar por los derechos de la comunidad autista. Sin embargo, y tras varios cambios en la directiva durante el 2009, la agenda de la fundación pasó de preocuparse por el bienestar de dicha comunidad a intentar “curar sus defectos”.
En el 2016, “Autism Speaks” anunció su nueva misión: “encontrar la solución para el ASD”.
Para llevar a cabo su propuesta, la organización inauguró “centros médicos” con el fin de que se vuelvan “normales” mediante distintos tratamientos.
Según varios testimonios, estos procedimientos violarían varios derechos humanos, muchos de los cuales incluso habían sido exigidos por la comunidad autista.
Atypical y una financiación atípica
La polémica de “Atypical” surgió a mediados de 2021 cuando los cibernautas descubrieron que gran parte de las ganancias iban a parar a la fundación “Autism Speaks”. Dicha destinación de fondos se posiciona totalmente en contra del mensaje de aceptación e integración que promulgaba la serie.
Además, en un artículo para Teen Vogue US, el actor Mickey Rowe, quien pertenece a la comunidad, decidió hablar sobre el tema y sobre cómo esta serie, más que representar a una persona autista, ha logrado ridiculizar aún más mediante comportamientos estereotipados y ofensivos.
En su artículo Rowe sostuvo que esto había sido advertido desde un principio cuando ni Rashid -la creadora de la serie-, ni la producción realizaron una investigación previa del espectro, el cual es mucho más amplio y complejo de lo que puede apreciarse en pantalla.
Sin embargo, no es la primera vez que la comunidad está en el foco de la mirada pública por culpa de los ataques. Por ejemplo, la cantautora autraliana Sia es conocida por sus controversiales dichos en contra de la comunidad y su apoyo, desde 2012, a “Autism Speaks”. Además, una de sus primeras producciones cinematográficas, “Music”, recibió bastantes críticas negativas debido a los estereotipos proyectados sobre las personas con autismo.
La película, cuya trama se centra en una adolescente autista, iba a ser protagonizada por una actriz autista; sin embargo, a causa de que la cantautora no quiso lidiar con la persona contratada, se le otorgó el papel a Maddie Ziggler, la niña protagonista de videos musicales como “Chandelier”.
En este sentido, el producto final “Music” fue un ataque directo al no solo no representar correctamente y estereotipar a la comunidad, sino también por el uso de “restraints”, una práctica violenta utilizada para “calmar” a una persona autista, la cual ha conllevado a cientos de muertes al impedir que se respire con normalidad.
La lista de ataques puede llegar a ser interminable y, lamentablemente, no es la primera vez que una comunidad es atacada o mal representada en un producto audiovisual. Sin embargo, como parte de la sociedad es necesario tener estas situaciones en la mira con el fin de poner un freno y hacer justicia por quienes son afectados, ayudando a que sus voces sean escuchadas realmente.