Coco Chanel: feminismo en pantalones

“La moda no es algo que solo exista en los vestidos. La moda está en el cielo, en las calles. La moda tiene que ver con las ideas, con la forma en que vivimos, con lo que está sucediendo”

Gabrielle ‘Coco’ Chanel es considerada una de las diseñadoras europeas más influyentes en la historia de la alta costura del siglo xx. Nació en Saumur, Francia, en 1883 y la mayoría de su infancia la pasó dentro de un orfanato.

Chanel incorporó una tendencia que transformó y rompió esquemas no solo en la indumentaria femenina, sino en su estilo de vida. Con una línea informal y cómoda, logró en las mujeres de la época una liberación y una igualdad no vistas antes.

Coco vistió a la mujer con prendas que solo eran utilizadas por los hombres: pantalones, chalecos de tweed, gabardinas, boinas marineras. Con su estilo delgado y cabello corto, introdujo un look andrógino que hace que, a simple vista, resulte difícil determinar si son hombres o mujeres los modelos, es decir, un estilo «unisex», que marca una ambigüedad entre lo masculino Andro y lo femenino Gynus.

«Antes que yo, nadie se habría atrevido a vestirse de negro. Prefiero el negro riguroso con el que se visten las monjas de Aubazine al abigarramiento en tonos pastel», decía Chanel.

Adelantada para su tiempo, Coco Chanel sabía cuáles eran los pantalones más favorecedores para las mujeres, que son incluso usados hasta el día de hoy, estableciendo así un feminismo en pantalones.

SEGUNDA GUERRA MUNDIAL

Rompiendo paradigmas como ninguna otra, impulsó a la mujer de principios del siglo xx a seguir un sueño de libertad y rebeldía, liberándola de los convencionalismos de la época.

A pesar de que siempre renegó de su origen humilde y trágico, tomó su trayectoria como impulso hacía una revolución singular en el ámbito de la moda. Sin lugar a dudas, el paso por el orfanato influyó mucho en su creatividad, ya que el observar constantemente a monjas le despertó un interés especial por la costura.

A sus 18 años, empieza a trabajar en un atelier de confección de lencería y, en sus ratos libres, comenzaría a cantar en el café La Rotonde. Ella amaba cantar, y sus canciones más reconocidas eran “Ko-Ko-Ri-Ko” y “Quiqu’avu Coco?”, razón por la que el público comenzaría a conocerla como “Coco”, nombre que la marcaría para siempre.

En 1909 comienza a diseñar sombreros y exhibirlos en su primera tienda, situada en el número 21 de la rue Cambonde de Paris, cerca del Ritz. Simultáneamente, inauguró la fundación de “Chanel Modes”.

Chanel demostró con creatividad, inteligencia, flexibilidad y confianza que se puede sacar adelante una marca a pesar de los grandes cambios y dificultades sociales.

Coco Chanel: Mujer emprendedora y empresaria

Sin lugar a dudas, Coco absorbió todo lo que se vivía en aquella época de 1914 en la que estalló la Primera Guerra mundial y lo transformó a partir de la indumentaria, los sombreros, la joyería, zapatos y perfumes en una forma y un estilo de vida mucho más deportivo y funcional, dejando de lado el corsé del traje femenino, y dando lugar a una mujer más arriesgada e innovadora, al permitirse mostrar los tobillos con sus faldas y arriesgarse a usar cortes de pelo muchísimo más cortos.

Además de revolucionar el mundo del calzado femenino con el uso de tacón bajo, contrastando con el tacón puntilla que estaba de moda en aquella época, Chanel elaboró junto a Raymond Massaro un estilo de zapato en dos tonalidades, un color beige en todo el zapato, que permitía estilizar las piernas, y un tacón de color negro, que da la percepción de pequeñez al pie.

En 1923, junto a Ernest Beaux, crea el perfume Chanel n° 5, uno de los más vendidos del mundo gracias a la gran influencia de Marilyn Monroe, que lo convirtió en un símbolo al decir en una entrevista que era lo único que se ponía en la noche antes de dormir.

En conclusión, Gabriele‘Coco’Chanel no paró nunca su actividad, ya sea como diseñadora o como activista. Murió a los 87 años como consecuencia de un ataque cardíaco en el Hotel Ritz, donde vivió más de treinta años. Al igual que tantas otras mujeres que cambiaron la historia, ella dejó una huella imborrable que en su caso tiene una representación física: un feminismo en pantalones.