Phoebe Lucille Bridgers es una cantante, compositora y productora oriunda de Los Ángeles, Estados Unidos. Nacida el 17 de agosto de 1994 y con sus actuales 28 años, es consagrada como una de las artistas indie más aclamadas de la escena musical, brindando a lxs oyentes experiencias musicales diferentes a las ya conocidas, a través de canciones que ahonda diferentes temáticas de la vida cotidiana, como la depresión, el amor, la separación e incluso la muerte, acompañada de su guitarra y su gran despliegue en producción electrónica.
Phoebe se adentra a la fama con su debut como solista en el año 2017, tras haber firmado contrato con la discográfica Dead Oceans y por medio del cual lanza su primer disco titulado Stranger in the Alps, el cual obtuvo una puntuación de 84/100 basada en 16 reseñas de críticos, lo que indica «aclamación universal».
En el año 2020 lanza su segunda bomba con el álbum Punisher (2020), el cual le otorgó 4 nominaciones a los premios Grammy.
Phoebe se ha cargado al hombro 2 premios Grammy, un sello discográfico de su propia autoría y una lírica melancólica tan excéntrica y tan propia que, esta es la ocasión perfecta, para contarte un poco más acerca de Phoebe Bridgers y su Punisher era.
Phoebe Bridgers, su gran disco
Punisher es un disco dotado de una gran tristeza y de una melancolía sumamente armónica, característica de Phoebe Bridgers. Ahondando en temas personales y, tal vez, con cierta dificultad para entender de lleno qué está sucediendo, Phoebe muestra su mundo interno, se abre como un libro y expone su forma de sentir, revelando al mundo diferentes temáticas extremadamente cotidianas pero que, llevadas desde su poética, logra apropiarse de su mundo musical y ofrecerlo como una novedad.
Tal es así, que el disco comienza con la canción titulada “DVD”, el cual posee una duración de 1:09 minutos y se compone de diferentes sonidos que se mueven como olas de un lado a otro, donde también se presentan murmullos, armonías pesadas y voces distantes, como quien se adentra en un bosque oscuro, pero también conocido, a fin de adelantar al oyente lo que está por vivir.
La siguiente canción “Garden Song”, comienza con la melodía final de “DVD”. La cámara se enciende y en primera plana aparece Phoebe de forma muy amena y descontracturada en una habitación, sosteniendo en su mano izquierda una pipa de agua, la cual enciende, inhala, exhala, llena de humo la pantalla y comienza el viaje.
El ritmo de la música sostiene la imagen de Phoebe que, un tanto desalentadora, comienza a toser mientras ella se vuelve algo borrosa. Posteriormente podemos ver cómo se van agregando distintos personajes a la trama de la canción, a través de la cual va narrando diferentes escenarios oníricos y habla de la importancia de aprender a leer y confiar nuestras acciones, así elegir el camino correcto.
La siguiente y tercera canción, rompe con todo lo anteriormente mencionado. Sí, “Kyoto” se presenta con soltura y naturalidad, con un ritmo que desentona del resto de las canciones puesto que se vuelve más movido y es donde vemos a Phoebe vestida con un disfraz de esqueleto, mientras su imágenes se encuentra superpuesta sobre fotos de Japón.
En esta canción nos habla acerca de la despersonalización, de aquellos momentos en los cuales sentimos estar completamente desconectados de nosotros mismos y vivimos fuera de nuestro cuerpo. Aún así, cabe destacar y es sumamente importante aclarar, que estos síntomas pertenecen a un trastorno en el cual existe una desconexión entre la mente de una persona y la realidad del momento presente. Esa realidad puede ser externa a la mente, con respecto al mundo que nos rodea; o interna, y entonces la persona se desconecta de su propia actividad mental.
Por ello Phoebe, utiliza el recurso de superponer su imagen en los diferentes paisajes, a fin de expresar cómo se siente la despersonalización. Esta idea surge de un viaje que realizó a este país, el cual no pudo disfrutar por haberse sentido completamente desconectada y totalmente incapacitada para gozar.
¿Qué significa “Punisher”?
La cuarta canción y, quizás, la más conmovedora y con mayor carga sentimental posee, es “Punisher” la cual le da nombre al disco. Punisher es un término frecuentemente utilizado en el ambiente de la música, para calificar de “intensos” o “pesados” a los fanáticos. Y como Phoebe no quería quedarse atrás, admitió ser una gran “punisher” del músico Elliot Smith. Es por ello que realizó esta canción en su honor donde, por medio de la misma y de forma implícita, expresa delicadamente cuánto lo admira.
En esta canción, Phoebe imagina cómo sería tener una conversación con su ídolo.
En una de las estrofas explica que no podría detenerse, tratando de explicarle cuán enamorada está de su obra y cuánto siente conocerlo. Nada que no le haya sucedido a cualquier persona amante de la música ¿no?
¿Y qué pasaría si te digo que te conozco?
Pero nunca nos conocimos.
Es lo mejor.
No puedo abrir mi boca
y olvidar cómo hablar,
porque incluso si pudiera
no sabría por dónde empezar
no sabría cuándo parar.
Quien escuche al menos uno de los discos de Elliot Smith, podrá entender su gran fanatismo. Con crudeza, melancolía y simplicidad, el cantautor estadounidense nos trae la imagen del bar, la luz tenue y un hombre solitario con mucho para decir. En el disco Punisher, se puede apreciar cuánto es que Phoebe conoce a su ídolo, realizando así arreglos vocales similares a los que, usualmente, eran utilizados por Elliot.
Halloween y Chinese Satellite: la muerte y el renacimiento del amor
Una guitarra y el viento soplando invocan la desolación. Phoebe tiene una hermosa tendencia a describir sus sentimientos a través de vivencias que forman parte de la vida cotidiana, con un poco de humor y oscuridad canta en Halloween:
Harto de las preguntas que sigo haciéndote
que te hacen vivir en el pasado,
pero puedo contar contigo para decirme la verdad
cuando has estado bebiendo y llevas una máscara
Cariño, es halloween
y podemos ser cualquier cosa.
Siempre sorprendida por lo que haría por amoralgunas cosas que nunca esperaría
No faltan las frases desgarradoras como “hay una última vez para todo” y “seré lo que quieras” mientras cierra la canción con su voz y la de un hombre en fade out, para después escuchar a una Phoebe que canta en la última canción del disco “He estado corriendo en círculos, fingiendo ser yo misma.” Abre paso a la desesperación de sentirse perdida y la ilusión de volverse a encontrarse consigo misma después del amor.
