El pasado 18 de febrero de este año, la ilustradora y directora de fotografía Isabel Ruiz Ruiz, publicó su trabajo más reciente: “Dentro”. Una novela gráfica que, apoyada en testimonios de las sobrevivientes del régimen franquista, busca plasmar en relatos ilustrados la realidad de las presas políticas en la dictadura que tuvo lugar entre 1936 y 1977 en España. 

Dentro de la mente maestra de Isabel Ruiz Ruiz

“Dentro” no es el primer trabajo que la autora crea de este estilo, si no que ya cuenta con varios libros ilustrados que buscan visibilizar a las mujeres de las diferentes disciplinas artísticas, culturales, científicas, literarias y filosóficas. Entre sus títulos más destacados, se encuentran “Mujeres” y “La estación de las hojas”. 

Con “Dentro” Isabel Ruiz Ruiz invita al lector a viajar junto a ella en una travesía hacia el pasado. Creando ilustraciones y basándose en lo dicho por protagonistas de uno de los episodios más oscuros de la historia española, produce una obra de arte que pretende —y más aún, logra— mostrar y educar.

Pero ¿cuál es el contexto de este libro? ¿Qué retrata?  “Dentro” inserta al lector en los años posteriores a la Guerra Civil española, en donde el régimen franquista inicia un período de represión, violencia y venganza que perdura durante casi 40 años. Fue en esta época en dónde miles de personas fueron ejecutadas —se estima que hubo más de 200.000—   y otras miles resultaron injustamente encarceladas, sin siquiera un juicio previo.

Las cárceles de mujeres almacenaron cantidades altísimas de presas, las cuáles fueron sometidas a condiciones extremas de hacinamiento, torturas y privación de derechos. Todo esto provocó una herida grande y difícil de sanar en la historia española, que aún hoy continúan generando secuelas. 

A pesar de esto, y aunque resulte doloroso, es fundamental preguntarse e investigar acerca de lo sucedido. Porque ¿de qué otra forma una nación puede recuperarse de un episodio tan traumático? ¿Qué es necesario hacer para prevenir que vuelva a suceder? 

Aunque lamentablemente no hay cura ni manera de asegurarse que episodios así se repitan, lo fundamental es no olvidar. Y para ello, es indispensable investigar acerca del hecho, hacer preguntas, remover las heridas causadas y concientizar. A lo largo de la historia, si hubo un aspecto social que acompañó a las tragedias y ayudó a transitar episodios turbulentos, fue el arte. 

En todas sus formas y colores, el arte permitió poner en palabras, dibujos y notas musicales, hechos que no parecían tener luz propia.

Es por eso que el trabajo realizado por Isabel Ruiz Ruiz en “Dentro” resulta tan valioso y significativo. La autora se apoya, por un lado en testimonios de las sobrevivientes y por el otro, en las investigaciones hechas sobre las prácticas genocidas en los centros penitenciarios. Esto permite que la obra logre representar mediante relatos gráficos, lo que significó aquella resistencia sumamente vital para las presas políticas de la dictadura de Franco, de manera clara y acertada. 

El proceso de creación de este volumen no fue sencillo para la autora, sino todo lo contrario. Resultó ser un gran desafío y uno de los trabajos más complejos a los que tuvo que enfrentarse. A medida que la obra fue desarrollándose y tomando fuerza, se sintió como una intrusa ya que no es historiadora ni contaba con un amplio conocimiento sobre dicha etapa oscura del país. Pero a pesar de los obstáculos, el resultado fue una obra original, genuina y atrapante. 

Las páginas de la novela se conectan mediante relatos independientes que sintetizan las declaraciones registradas por las sobrevivientes, ilustrando así los centros de reclusión para mujeres durante la dictadura, con tintes emocionales acompañando a los testimonios.

La ilustradora retrata las vivencias de las presas utilizando dibujos de formas sencillas, sin demasiado virtuosismo y con trazos faltos de trucos. Lo verdadero y crudo resalta sin la necesidad del uso de colores, dejando en evidencia el ambiente oprimido, gastado y sofocante que protagonizó cada uno de los testimonios de las prisioneras sobrevivientes. 

Los relatos que componen el libro no corresponden a historias particulares o a centros penitenciarios concretos, ya que la autora intenta ilustrar la generalidad de los hechos, los horrores comunes y las similitudes entre testimonios. Isabel Ruiz Ruiz busca desprenderse de lo meramente anecdótico y logra rendir homenaje a las mujeres que fueron injustamente olvidadas. 

En “Dentro” no fue suficiente relatar el dolor y la miseria de las protagonistas, sino que fue necesario y fundamental ir más allá. Retrata la solidaridad, la esperanza, la dignidad y la búsqueda de justicia, que fueron la luz al final del túnel que las prisioneras tuvieron que mantener viva durante esos años temibles y oscuros. 

Aunque nada de lo sucedido durante el régimen franquista fue positivo, puede decirse que obras como la de Isabel Ruiz Ruiz permiten ver la belleza y la luz escondida que dejó un episodio tan terrible.